Contundente adhesión en la Comarca Andina al primer paro contra Milei


Camila Vautier
enero 24, 2024
Miles de personas de toda la Comarca Andina se volcaron a las calles de El Bolsón este miércoles 24 de enero en el marco de la jornada nacional de paro y movilización contra las medidas de ajuste del gobierno de Javier Milei, el DNU y la Ley Ómnibus. La marcha fue masiva y reunió, como hace tiempo no ocurría en la región, una amplia diversidad de sectores de la sociedad bajo un mismo mensaje: la Patria no se vende.
El sol picaba en el asfalto a las once y media de la mañana y el calor ya comenzaba a sentirse cuando empezaron a llegar las primeras columnas a la esquina de Anses, lugar desde donde partió la multitudinaria marcha de la Comarca Andina en el primer paro nacional contra las medidas de ajuste del Gobierno de Javier Milei.
Fue masiva. Congregó a organizaciones sociales, políticas, feministas, de derechos humanos, trabajadores y trabajadoras estatales, de la salud, educación, de la cultura y del Servicio Nacional del Manejo del Fuego, además de cientos de personas autoconvocadas. El recuerdo más cercano de una movilización tan contundente y diversa en la región se remonta a 2013, cuando el pueblo de El Bolsón se levantó contra el loteo de Pampa de Ludden.
El mensaje que dejó la calle fue categórico: No a la Ley Ómnibus, No al DNU, la Patria no se vende. “Espero que el mensaje llegue a los diputados y senadores que tienen que votar en contra de este mamarracho legal y jurídico”, expresó Leandro García, diputado provincial por el Bloque PJ.
Todos los sectores, todos
Son múltiples los grupos sociales afectados por el DNU y la Ley Ómnibus y hasta ahora, venían manteniendo luchas sectoriales. Este paro, en la Comarca, logró unirlas.
Una jubilada, con lágrimas en los ojos y una bandera argentina atada en la espalda, contiene el nudo en la garganta y exclama: “Marchamos por la Patria, vienen por la tierra, por el agua, por el litio. Marchamos por nuestros nietos y nuestros hijos”.
“Desde el movimiento feminista estamos defendiendo un modo distinto de ver el mundo que está fuertemente arrasado en la letra del DNU y de la Ley Ómnibus. No estamos dispuestas ni dispuestes a retroceder”, asegura Andre González, activista feminista y socorrista. “Este gobierno nos ha tomado como enemigas porque denunciamos el fondo de la cuestión: este sistema capitalista, extractivista y patriarcal que es invivible”.
Uno de esos derechos es el de la salud pública, que ya está sufriendo recortes, según denuncian los propios trabajadores. “Nos quieren vaciar el hospital, no tenemos insumos. La situación es crítica”, alertó Valeria, médica del Hospital de El Bolsón, sosteniendo una bandera por la salud pública.
El Servicio Nacional del Manejo del Fuego también estuvo presente. “A nosotros nos sacaron un contrato que teníamos por un año con renovación automática y lo cambiaron por uno de tres meses con revisión”, denunció un brigadista. “El año pasado luchamos mucho contra la precarización laboral, viene un gobierno nuevo y es peor, nos vulnerabilizan más”. Por esta situación, están en riesgo 900 puestos de trabajo en todo el país.
“Esta Ley Ómnibus es injusta para nosotros, los trabajadores y trabajadoras que si ya estábamos excluidos, ahora va a ser peor. Queremos un trabajo digno, que no suban los precios y que los nativos de la zona puedan tener un terreno para trabajar la tierra”, reclamó desde las calles una representante del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE).
Ariel, integrante de ATE Andina Sur, asegura que la marcha es para “repudiar el DNU y defender los derechos de los trabajadores y las trabajadoras, de la tierra y el agua que quieren vender al mejor postor”.
Pocho, delegado regional de Chubut Línea Sur de la UTT, afirma: “estamos parando en todo el país contra este brutal ajuste al bolsillo de toda la clase trabajadora. La mitad de la Argentina tiene hambre, por eso los pequeños y pequeñas productoras de alimentos tenemos un papel central en la construcción de la soberanía alimentaria de nuestro pueblo”.
Bernardo es docente de Epuyén, llegó desde su pueblo junto a otros compañeros y dice que la marcha es una “práctica pedagógica y política”. “Este encontrarnos con estudiantes, con compañeros y compañeras nos habla de un entramado que es una red solidaria. Esto es clave porque todo el tiempo están apuntando al sálvese quien pueda. No nos vamos a salvar solos, vamos a juntarnos y resistir”.
Lo que se viene
Mientras en la Cámara de Diputados se negocia el tratamiento de la Ley Ómnibus y el ministro de Economía lanza amenazas por redes sociales, el paro fue una muestra contundente de que un amplio espectro del pueblo argentino está en contra de estas medidas. Medidas que, lejos de castigar a “la casta”, como pregonó Milei en campaña, recae sobre las y los más humildes, afectando principalmente a mujeres jefas de hogar y jóvenes.
Se vienen días claves, donde está en juego la capacidad política del presidente Javier Milei de llevar adelante sus reformas antiderechos. En tanto, en las calles, resurge de a poco la organización colectiva, la única salida posible ante el avasallamiento de los poderosos.
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