EL IMPACTO DE LOS DESPIDOS EN LA COMARCA ANDINA

En vísperas de año nuevo, Camila abrió el grupo de Whatsapp de su trabajo de Radio Nacional. No había allí una tarea nueva: era un archivo de Excel que le había llegado a un compañero de otra emisora. El documento tenía un listado de las personas que ya no tenían trabajo. Entre los nombres, estaba el suyo.
De esa manera, la joven contratada hace años en Radio Nacional El Bolsón, graduada de la Universidad Nacional de Río Negro, se enteraba que no tenía más empleo. Al igual que decenas de personas en la Comarca Andina del Paralelo 42.
El plan de despidos del gobierno de Javier Milei comenzó en diciembre de 2023 y hasta el momento, a nivel nacional, ya son 15 mil las y los empleados públicos que no tienen trabajo. ¿Cómo afecta esta medida de vaciamiento del trabajo estatal en la Comarca?
En distintos ámbitos dentro de nuestra región se registraron despidos. En distintos organismos del Estado como municipios, medios de comunicación, administraciones, entre otros que se detallarán a continuación, hubo 43 trabajadoras y trabajadores echados. No solamente son personas que quedaron a la deriva en medio de una crisis que crece mes a mes, sino que afecta directa o indirectamente a la cotidianidad de los habitantes de la Comarca.
Radio Nacional El Bolsón fue uno de los primeros organismos afectados. La emisora que llega a los rincones más lejanos, rurales, con falta de conectividad y brinda información local y servicios a toda la comunidad, tiene empleados en planta permanente pero también contratados que llevan adelante múltiples tareas. En diciembre, la mayoría de ellos, como Camila, se quedaron sin empleo.
“Nadie nos dio una explicación, nadie dio la cara. Fue un acto cobarde”
Fueron 500 los contratados despedidos en el país -a través de un mensaje, no de un telegrama-, cuatro de ellos de El Bolsón. Y con esto, el trabajo para los que quedan, se incrementa. “Se deben cubrir lugares que quedaron vacantes y a veces no se puede hacer”, expresó María Lincan quien es productora de Radio Nacional El Bolsón y fue directora hasta diciembre del año pasado.“Esto afecta el federalismo así como Radio Nacional, Télam y la TV Pública, somos medios que desarrollamos producciones y contenidos donde no hay lucro mediante. Además cumplimos una función social”, indicó.
“Nadie nos dio una explicación, nadie dio la cara. Fue un acto cobarde”, dice Camila Jaldo. Se recibió de Técnica en Diseño Audiovisual en la UNRN y llevaba adelante el contenido para redes -entre otras múltiples tareas, típico de contratado-. Camila describe su sentimiento con tristeza, pero también con enojo. “Me sentí muy utilizada”, dice. Y claro. No podemos dejar de mencionar que los contratos fueron una ayuda a la hora de echar a la gente. Precarización laboral al máximo y falta de estabilidad. No horas extras, no seguro a los equipos propios con los que cada trabajador o trabajadora desarrollaba su función. Miedo e incertidumbre, desprotección y malestar. Los síntomas de un contratado.
“A diferencia de lo que se intenta instalar de demonizar las áreas del Estado, yo creo que la gran parte que trabaja allí es un núcleo de gente que trabaja muy comprometida por el bienestar de las personas”
“A diferencia de lo que se intenta instalar de demonizar las áreas del Estado, yo creo que la gran parte que trabaja allí es un núcleo de gente que trabaja muy comprometida por el bienestar de las personas”, con orgullo de haber formado parte, dice Camila.
Hoy Radio Nacional El Bolsón solo tiene programación propia por las mañanas. La caída de los cuatro contratos ha significado la falta de cobertura de turnos en la emisora. Tareas de producción, redes y locución ya no están. “Su caída se nota en que no tenemos más turno a la tarde, a la noche ni tampoco hay productores a la mañana y se hace difícil para los que quedamos”, dijo Conrado Castaldi, comunicador de la radio quien continúa en la emisora. Además agregó: “el recorte del Estado Nacional para la radio continúa porque hay que sumarle ahora a los contratos caídos, han avanzado con las horas extras del fin de semana por lo que ya no hay ni guardias y tampoco se cubren los feriados”. El pasado 24 de marzo, Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia, no fue cubierto por primera vez en años en la localidad, por decisión del gobierno nacional. Algo inédito.
El INTA Agencia de Extensión Rural El Bolsón no sufrió despidos, al igual que la Oficina de ANSES en El Bolsón. En cambio, la oficina de ANSES El Maitén, de sus cuatro contratados, tres ya no tienen más trabajo ya que se les dio de baja. Lo cual deja a las y los habitantes de El Maitén con la oficina más cercana a más de 50 kilómetros. Tanto ANSES como INTA son dos organismos elementales en la zona pero que trabajaban con otros organismos que sí se vieron afectados. Uno de ellos es el Área de Agricultura Familiar, un organismo nacional con delegaciones en Río Negro. Si bien no hay oficinas en la Comarca, un grupo de profesionales trabaja desde hace años en la región con asesoramiento, acompañamiento a organizaciones o comunidades de Pueblos Originarios, mesa de desarrollo, línea de financiamiento, compra de insumos, y en las emergencias por incendios. Trabajos fundamentales en nuestra región. La Cooperativa La Mosqueta o la Feria Franca, por ejemplo, trabajan con el acompañamiento del Área que este gobierno ha decidido cerrar. De los 19 empleados, solo siguen cinco en la Comarca que poca certeza tienen sobre su continuidad porque el área se vació. Veterinarios, ingenieros agropecuarios, ingenieros agrónomos, administrativos que hacían -también en condiciones precarizadas, con contratos anuales y sin lugar físico en el último tiempo para trabajar- que la rueda de la agricultura en nuestra comunidad gire. “No hubo una comunicación oficial, a la mayoría de dieron de baja por sistema o al mail institucional”, explicó Guillermo Carbajal, ingeniero agrónomo que trabajaba en el organismo. Otra vez se repite.
Aunque no hubo despidos en el Parque Nacional Lago Puelo, la situación de Parques, a nivel nacional, es alarmante. En la institución, de un total de 2200 trabajadoras y trabajadores (de los cuales la mitad está en planta permanente y la otra no tuvieron en marzo la noticia de 76 despidos que incluyen,pese a la promesa de “no tocarlos”, a brigadistas, personas que ingresaron gracias al cupo trans y cupo por discapacidad, empleados con tutela sindical y con muchos años de antigüedad (algunos más de 20 años). “No hay ñoquis, hay gente que lidera proyectos muy importantes en sus áreas protegidas”, indicó Paula Werber trabajadora en el Parque Nacional Lago Puelo e integrante de la Coordinación General de Delegadxs de ATE en Parques Nacionales.
Porque claro, no podemos obviar la situación de Parques Nacionales por el solo motivo de que no haya habido despidos. ¿Por qué? Primero porque nunca está de más recordar que de los 47 trabajadores y trabajadoras del PNLP hay 16 contratados y que su continuidad pende de un hilo. Algunos con contratos hasta junio y otros hasta diciembre. Segundo, porque el organismo trabaja mancomunadamente con todas las áreas del país. ¿Cuántas veces escucharon que nuestros brigadistas viajan a Córdoba a combatir un incendio? O a cuántos de ellos recibimos en incendios en nuestra región. La institución se nutre, trabaja en conjunto, afronta las adversidades. Cuida y protege. Hace lo que no hace esta gestión siniestra.
“El aire, el agua, el bosque, el suelo, el patrimonio cultural que hace a nuestra historia. Son los bienes comunes lo que están atacando cuando nos están despidiendo a nosotros. No solo quieren achicar el Estado, sino que se hace evidente que quieren darle otro destino a las áreas protegidas. Reducir al personal de Parques Nacionales no es solo que ese empleado no pueda, por ejemplo, pagar la cuota de su club. También se está desprotegiendo el patrimonio cultural y natural de la Argentina”, advierte Paula con tono triste pero firme.
En junio de 2023 se inauguró un Centro de Acceso a la Justicia (CAJ) con perfil comarcal, es decir un sitio donde profesionales asisten y asesoran a personas de El Bolsón, Lago Puelo y El Hoyo que tienen problemas u obstáculos para el ejercicio de sus derechos. Liliana es trabajadora social del CAJ en la Comarca Andina. Hasta diciembre trabajaba con Esteban, sociólogo, y junto al abogado Maximiliano. Ellos fueron notificados por mail el 29 de diciembre a las 18 horas que ya no se renovaba su contrato, o sea, se quedaban sin trabajo. El CAJ sigue funcionando, pero con una sola persona que no da a basto con la cantidad de consultas. Hace sola el trabajo de tres personas. De tres profesionales.
Con el cambio de gobierno, el año pasado, se vieron afectados empleadas y empleados municipales. Sandra Contreras, Secretaria General ATE Andina Sur indicó que no hubo despidos en El Bolsón y tampoco en Ñorquinco. Pero sí los hubo del otro lado del paralelo: en Lago Puelo cinco personas quedaron sin contrato, en Cushamen hay también cinco bajas, mientras que en El Hoyo hay 10 personas que ya no poseen contrato para continuar desempeñando sus tareas. Así lo informó Soledad Ayail, Secretaria General ATE Comarca Andina. “No nos da el día para atender los reclamos sindicales. El rol del sindicalismo es fundamental, no hay que bajar los brazos”, dijo Soledad. Además, aclaró que si bien hubieron más despidos a nivel municipal en Chubut cuando asumió el nuevo gobierno, se pudieron recontratar a varias personas como es el caso de El Hoyo y Epuyén. La lucha continúa en Lago Puelo donde se intenta hace meses reincorporar a cinco personas que trabajaban en la Municipalidad.
De un momento a otro, sus pobres contratos quedaron sin efecto. De nada sirvió trabajar cuatro años sin parar, poner el cuerpo, mente, alma (y equipos propios) en que el trabajo funcione. No había en muchos casos explicación. Ni hablar de indemnización. Los derechos laborales brillaron por su ausencia una vez más.
En junio, nuevos contratos llegan a su fin con la incertidumbre de su continuidad. Más organismos siguen con bajas, recortes y ajustes dentro de la Comarca Andina, por lo que el tema no quedará cerrado en este texto.
¿Es casual que un medio público con llegada a los sitios más difíciles se desmantele? ¿Es al azar “achicar el gasto” en Agricultura Familiar cuando es quien articula con los principales actores sociales en la temática? ¿Quitar a gente fundamental en la Administración de Parques Nacionales es porque “no hay plata” o porque hay otros intereses para con esas áreas de fondo? La respuesta decae por sí sola. Saque sus conclusiones, aquí nada es casual. El sistema cruel lo ha demostrado. Cuando la maldad se asoma, es porque se asoman intereses -y de los grandes-. Nadie es tan malo porque sí. Nunca.
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