Memoria del Fuego: Homenaje a las primeras voces


Por Estanislao Cavanna
octubre 11, 2024
El próximo 12 de octubre habrá una muestra interactiva de grabado en el Centro Cultural Eduardo Galeano. Será en homenaje a quien le da el nombre, y tras el propósito de materializar un libro artesanal que conmemora uno de sus trabajos más icónicos. Los nacimientos. El primero de la trilogía de Memoria del Fuego.
Este fin de semana el Centro Cultural de El Bolsón olerá a tinta sobre madera: el Grupo de Grabado de Galeano abrirá las puertas de su taller para mostrar un proyecto que lleva al menos nueve años. Se trata de un homenaje al libro del periodista y escritor uruguayo Eduardo Galeano que lleva por nombre Memoria del Fuego.
Desde las 16 hs podrán verse en la sala Eguer Puerto “los últimos diez grabados de la serie y muestra de grabados que ilustran los mitos y leyendas de los pueblos originarios de América (Abya Yala)”, indicaron desde la organización.
Leonardo Occhipinti, tallerista de grabado e impulsor del proyecto cuenta que el mismo comenzó en el año 2015 con motivo de realizarle un homenaje a Eduardo Galeano tras su fallecimiento.
Occhipinti recuerda que “en 2013 cuando llegué al centro cultural me hice cargo del espacio de grabado, activamos la prensa que ya estaba ahí, y preparamos el taller para que sea un taller de Xilografía”. Con emoción por cerrar un ciclo comenzado hace tantos años atrás, sintetiza que “conseguí las últimas cosas que faltaban: tinta y fieltro, y se armó el taller de grabado”.
Un comienzo, los nacimientos y una historia
Occhipinti cuenta que la convocatoria, surgida en el año 2015, fue con motivo de “generar una obra colectiva, un movimiento más allá del taller de grabado, uno donde podamos trabajar con el grabado, expresar y también sobre todo difundir la técnica, porque no era tan conocida en la Comarca”.
Asimismo, el artista, tallerista y docente rememora que “empezamos a ilustrar los cuentos de las primeras voces del libro de Eduardo Galeano, que es la intro del libro. La voz de los pueblos originarios, sus mitos y leyendas de toda América, desde el norte hasta el sur. Y ya teníamos alrededor de 20 grabados, y a los 21 iba a salir el libro homenaje”.
Sin embargo, un acontecimiento interrumpió el proceso. En la última sesión del Concejo Deliberante local se aprobó la firma de un acta-acuerdo entre el ejecutivo municipal y una empresa privada para un loteo en las aguadas del paraje de Mallín Ahogado.
“Fue todo un movimiento social muy importante, del loteo de La Pampa de Ludden, por la defensa del agua, del territorio”, cuenta Occhipinti. Luego de aquella sesión del Concejo Deliberante en la plaza San Martín, renombrada en ese entonces como Soberanía popular, un grupo de personas decidió realizar un acampe pacífico por el no loteo de la empresa en connivencia con el Estado municipal.
“Al acampe permanente llevamos la prensa, con todos estos tacos que veníamos trabajando para el homenaje. Estuvimos en la plaza, en el acampe, desde temprano imprimiendo para esa muestra”, recuerda. A partir de aquella organización social “todos los grabados salieron antes de que salga el libro, porque estaban en las calles, en las remeras, en la manifestación”.
Por cada uno de los relatos narrados en el libro hubo una xilografía ilustrada, “En la primera manifestación hicimos 500 remeras, después hubo otra muy grande, una en enero, y otra en febrero e hicimos 700 remeras, con estos diseños de los cuentos, y otros que hicimos con mensajes sobre la defensa del agua y el territorio”.
“Estaban relacionados, porque en los cuentos de los pueblos originarios, están los cuatro elementos, de una manera o de otra, cómo surgen, cómo influencian en los distintos quehaceres del humano”, afirma Occhipinti. “Entonces, en los motivos están presentes, tanto la tierra, como el agua, como el fuego, como el aire”, resume.
A partir de esa experiencia la identidad del grupo, que estira tintas e imprime estampa de diversos colores y tamaños en el Centro Cultural, “tiene que ver con el compromiso social, con un apoyo a las demandas de la población”.
“La conquista de América, ¿Es algo del pasado o es algo que todavía está sucediendo?” se pregunta el tallerista. “Nos prenden fuego la selva y los bosques, pasa en la actualidad porque sigue siendo parte de ese mismo proceso histórico, no son hechos aislados, es esa misma conquista que continúa”, asume.
“Por eso está vinculado también, a todo ese compromiso social, también sacamos la prensa cuando aprobaron la minería”, recuerda Occhipinti y retrata la escena: “hubo movilizaciones donde se vieron todos los tacos que fuimos trabajando. En 2017 decidimos sacar el libro, finalizar el último grabado e imprimimos el libro Homenaje a Eduardo Galeano. Hicimos la muestra, antes habíamos organizado el primer festival de grabado para recaudar fondos y conseguir la plata del papel del libro”.

“La gente nos recordaba de haber estado en la calle y ya nos conocía”, confiesa Occhipinti. “Gracias a toda esa gente pudimos sacar los libros y esos libros después llegaron a Chile, cuando viajé a Santiago de Chile, donde lo presentamos y nos conocimos con Xilografía o Muerte. También ahí expusimos en Plan Sofá que es donde está el taller de Xilografía o Muerte, y después de eso hubo un impasse y se disolvió el grupo. En 2018 volvimos a convocar, para refundar el grupo de grabado y continuar con ese espacio de grabado, dándole crecimiento a lo que es el grabado y a la vez toda esa identidad que hablábamos antes.”
En el año 2018 se refundó el grupo de grabadores y grabadoras a través de la convocar a ilustrar Ventanas que es del libro Palabras Andantes de Eduardo Galeano. “Teníamos que ilustrar la ventana que elijamos e hicimos una exposición. Fueron relatos sudamericanos de distintos lugares, muchos escritos en los viajes de Galeano”.
“El grupo también tiene mucho de esa identidad sudamericana porque siempre estuvimos ahí en esa corriente ilustrando esos libros. Siempre intercambiando y generando nuevos espacios donde surge la exploración y podemos darle crecimiento a las artes gráficas”, enfatiza Occhipinti.
La fundación del grupo Ventanas fue a la parte de otra grupalidad artística que lleva por nombre Andanzas. “Como un juego de palabras” cuenta el tallerista y artista. “Así fueron Las Palabras Andanzantes. Esa combinación con otro proyecto de la Asociación Artístico Cultural Sur, que es Andanzas, nos vinculamos e hicimos varios eventos juntos. En ese caso fue Ventanas Abiertas a la Danza para un festejo de cumpleaños de la asociación”.
Durante la pandemia de covid-19 el taller continuó funcionando. “En paralelo yo daba el taller de grabado, que fue también un gran impulsor para el encuentro”, cuenta Occhipinti. “Abrir las puertas a un montón de personas para explorar, para conocer y avanzar en esta técnica siempre fue como un semillero en el que yo los invitaba si querían, a ilustrar un cuento y a formar parte de la obra colectiva”.
Un año después, en un nuevo aniversario de la Asociación artístico-cultural Sur que da alojo al Centro Cultural se presentaron algunos grabados más. “Hicimos la nueva exposición de nueve grabados que se sumaron a la obra Homenaje”, recuerda con cierto entusiasmo en su voz el tallerista.
A partir de allí aparece el nombre de Homenaje a las Primeras Voces, “porque nos resonaba mucho más acorde a lo que también pensaría Eduardo Galeano”, dice Occhipinti. “Esa vez hicimos una performance con Esteban Valdivia, una intervención sonora con instrumentos antiguos de América. Un despliegue escénico con Andanzas también vinculado. Tuvimos el gusto de tenerlo a Esteban ahí con su perfo de instrumentos precolombinos, las plumas de cóndor y quedamos todos alucinando, fue un regalo para toda la comunidad artística. Luego de esa muestra seguimos con algunos tacos, que no había llegado la muestra de esos nueve grabados. Esto siguió en el taller de grabado y en 2022 se siguió prendiendo fuego”.
“El 24 de marzo del 2022 presentamos una exposición muy grande, donde sumamos 18 grabados que es casi la misma cantidad que habían salido de la primera vuelta en 2017. Así que ese año dimos un avance grande y también hicimos perfo de la oralidad de los cuentos, donde surgió también darle importancia a la parte escénica. Donde la oralidad ocupe el espacio del aire y pueda estar presente de la misma manera que antes, hoy en día así como fue transmitido generación a generación, de boca a boca y a viva voz”, afirma Occhipinti.
“Es esa misma fuerza que está presente en cada una de las muestras que hacemos. Ocupamos el sentido de la vista, el arte visual y también podemos ocupar otros sentidos como era antes. Que estaba todo vinculado, no separado en distintas ramas. La danza, la música y el canto. La palabra, la voz todo es parte de lo mismo. Entonces estaba bueno abarcar esos otros sentidos, para aportar una atmósfera a esos grabados que nosotros veníamos haciendo”.

Esta vez, con motivo del 11 de octubre, la intención es similar. En consonancia con la conmemoración del Último día de libertad de los Pueblos Indígenas, en memoria de la llegada de Colón en 1492, se realizará un evento para juntar fondos e imprimir un nuevo libro.
La obra de Galeano, y las obras xilográficas que desprenden de la misma, reivindican la memoria histórica y colectiva de las culturas indígenas que han sido silenciadas durante siglos en nuestro continente. Y aún continúan siendo brutalmente vulneradas en sus derechos.
Construcción de la memoria, entre política y literatura
Uno de los textos más icónicos, además de Las venas abiertas de América Latina, escrito por Eduardo Galeano es la trilogía de Memoria del Fuego, publicada entre 1982 y 1986. La misma encuentra a Los Nacimientos, con Las caras y las máscaras, junto a El siglo del viento.
Memoria del Fuego narra la historia de América Latina desde la creación del mundo hasta el siglo XX. Ordenados cronológicamente, cada uno de sus volúmenes contiene una serie de relatos breves, muchos de ellos escritos en prosa. En el texto Galeano cuenta mitos y leyendas de los pueblos indígenas, entrelazados con datos históricos, de modo tal que construye una visión propia de la memoria sobre los territorios.
En Los nacimientos se encuentran reunidos los mitos indígenas de fundación, o época precolombina, hasta el año 1700. Asimismo, tanto las historias y mitos de la creación como la llegada de los europeos, la denominada conquista de la corona española, la caída de los imperios azteca e inca, y el devenir político cultural del continente ante la violencia y enfermedad traídas por los colonos.
Galeano invita a quien lo lea a reflexionar en torno a las consecuencias de la colonización, como así también a comprenderla desde la cosmovisión de los pueblos y culturas indígenas. Desde su mirada y vínculo con la naturaleza y el universo.
Por caso, en su texto aparecen las leyendas de Quetzalcóatl, el dios serpiente emplumada de la mitología azteca, y del emperador que enfrentó la llegada de los conquistadores españoles Moctezuma. De igual modo, se presenta a Bartolomé de las Casas, un fraile dominico que luchó por los derechos indígenas durante la América colonial.
Llama la atención que en los tiempos actuales lo expuesto por Galeano aún mantiene vigencia. En ese marco, el Grupo Grabado Galeano que pertenece al Centro Cultural homónimo, mostrará 64 ilustraciones que surgen a partir de sus textos. Luego de una primera edición en el año 2017, el grupo se renueva año a año. Se aventura a un nuevo libro, esta vez uno que concentre xilografías de todos los relatos presentes en Los Nacimientos. Nos invita a ser parte de la muestra interactiva Memoria del Fuego. Donde podrán asistir con una remera, buzo, parche u hoja que quieran estampar con esta identidad Originaria de la Madre Tierra.
El grupo utilizará todo lo recaudado para la finalización de la obra, que será la edición del libro que contiene 64 grabados, en los que participaron muchas personas durante casi 9 años.